miércoles, 31 de octubre de 2007

Halloween


Me he ahorrao unas libritas en un disfraz para esta noche.......
Las caretas en Brighton valen una pasta.

Ahora que me veo........será por esto que la gente se cambia de acera cuando vengo a casa ????
Tendré que regresar a mi aspecto anterior con urgencia antes de que me detengan y me metan en una rueda de reconocimento en la comisaría de Brighton.

Besos a ellas....y abrazos a ellos.

Davidin Pink...

viernes, 26 de octubre de 2007

Fred

Buenas noches a todos/as:

Había escrito ya medio blog contando como es la casa y la ciudad donde vivo con un poco más de detalle, pero casi que lo dejo para otro día.

El cuerpo me pide realmente dedicarle un capitulo unico a Fred, que como os podéis imaginar (sobre todo porque ya lo he contado en el blog anterior....) es mi "host Father".

La verdad es que es tan grande el cambio que he vivido desde que dejé atrás mi etapa en Vancouver, que no sabría por donde empezar.

Tengo que reconocer, que al principio, cuando me facilitaron los datos de la familia donde iba a pasar las siguientes 12 semanas, dudé un poco.
Estas dudas fueron alimentadas, todo hay que decirlo, por mi gran ex-compañera Anna Mensa (desde aquí un saludo......Anna), que me puso en antecedentes de la fama que Brighton tiene como paraíso de los gays.

Obviamente, una casa donde el hombre vive solo, y con un perro pequeño (así lo describía la carta que recibí de la empresa con la que he contratado el curso), podría dar a entender que le gustaba alojar estudiantes por motivos bien distintos a los económicos.

Con esa premisa me vine, porque la primera llamada telefónica que le hice desde Madrid para avisar de mi llegada, no despejó ninguna duda a este respecto, bien al contrario alimentó algunas más que tenía, puesto que tanta amabilidad me llegó a desconcertar un poco.

Aprovecho para decir, que el primer contacto telefónico con Fred, fué de lo más esperanzador.
Oir al otro lado de la línea, a una persona hablando un perfecto inglés, me tranquilizó, sobre todo después de la experiencia vivida los tres meses anteriores.

En este sentido, tengo que decir que esa primera conversación me motivó bastante, porque me entendí perfectamente con él. Estuvimos un buen rato hablando sobre como llegar a su casa, las combinaciones de transporte que tenía......etc.
Como digo, me entendí a la perfección lo cual me animó en lo que respecta a mi aprendizaje del idioma.

Obviamente utilizó unos términos bastante simples que me hicieron pensar al principio, que se trataba de un profesor o algo parecido, por la pronunciación y la claridad con la que se expresaba.

En fin, con estas premisas me presenté en su casa.

Antes de continuar y como no quiero que el colectivo (numeroso por cierto) de Gays de Brighton me pegue, diré que he hecho referencia a las posibles inclinaciones sexuales de Fred, porque antes de venirme hubo algún comentario jocoso por parte de ciertas personas con las que estuve en mis cortas vacaciones, que se referían a la posibilidad de que a Fred le gustase no solo darme conversación. Y lo dejo aquí porque me consta que este blog lo leen menores de edad.

Hecha esta puntualización, continuaré diciendo que una vez que tomé posesión de mi habitación en la casa y hablé con Fred unos minutos, me dí cuenta que es como si hubiese escrito una carta a Papa Noel y me hubiesen concedido mi regalo de Navidad por anticipado.

Y no es que viniese muy condicionado de Canadá. Es que se trataba del sitio perfecto para mí en lo que me quedaba de curso.

Lo primero que se me ocurre decir de él, es que es una buena persona.
Dicho así queda bastante simple, pero es la mejor descripción que encuentro para definirlo.

Yo tengo una teoría sobre la buena gente referida a los que son buena gente pero no lo comparten con nadie y los que son buena gente y además "ejercen" activamente como tales.

Fred ocupa este segundo lugar.

Sobre su filosofía de la vida, habría para escribir muchos blog, pero diré que no tiene móvil (ni quiere tenerlo), no tiene internet (ni desea aprender a "surfear" en la red), tampoco tiene coche ni carnet de conducir y que si tiene televisión es gracias a su hermana que le regaló una, muy moderna y grande por cierto.

Dicho así, da la impresión que se trata de una persona que no vive en este mundo, pero bien al contrario, creo que tiene la cabeza perfectamente amueblada y no necesitada de ayudas externas para conservarla.

Tiene 58 años y es viudo.
Trabaja tres dias en semana, únicamente para mantener la actividad que le permita acceder a la pensión dentro de un par de años.

Su trabajo consiste en reponer los enseres de un supermercado, aquí en Peacehaven.

Solo hay dos cosas del trabajo que no lleva demasiado bien:
La primera es que se trata de un trabajo nocturno. Entra a las 10 de la noche y termina a las 7 de la mañana, pero le compensa por la cercanía a su casa.
La segunda es la de tener que reponer algunas cosas pesadas (Packs de cocacolas de dos litros...por ejemplo) y que según él, colocan en los estantes superiores los lumbreras del supermercado para hacerle la vida más dificil a él que debe reponer las que venden y a los clientes que quieren comprarlas,

Como me cuenta, es un trabajo bien pagado y que le permite disponer del dinero suficiente para vivir hasta que le llegue la jubilación.

Esto es lo que conocí de él durante la primera semana.

Transcurridos unos días, y dado que dispone de mucho tiempo libre, he podido mantener largas conversaciones con él, que me han ido dando la razón en lo que respecta a la definición que hice al comienzo del blog.

Antes de comentar otros aspectos de su personalidad y para dar un poco más de forma a lo que he comentado sobre mi "carta a los reyes", diré que le apasiona el fútbol. Es un fan incondicional del Liverpool y está bastante puesto en lo que respecta a jugadores, equipos y todo lo que tiene que ver con la liga española.

Hemos tenido largas conversaciones sobre Fernando Torres y porqué el "futbol-fuerza" británico le vá mucho más a su juego que las ferreas tácticas que tanto se estilan en España.

Madre mía !!....yo hablando en inglés de fútbol y encima con un entendido en la materia !!!

Por no extenderme demasiado en el aspecto gastronómico, diré que no tengo nada que objetar, si no fuese porque en determinadas ocasiones se excede en la cantidad de comida que prepara y obligado en parte por la cortesía y en parte porque lo que cocina está exquisito, el que suscribe se lo come sin rechistar, lo que está provocando aporte en exceso de calorías que mis michelines están agradeciendo.

Pero lo que sin duda, mas tengo que agradecer a Fred, es que se preocupa por mi aprendizaje, dándome clases de conversación gratis a diestro y siniestro.

Hablamos de todo. De fútbol, de política, religión, del tiempo.....
Todo es susceptible de ser hablado en esta casa, lo cual es impagable visto el motivo por el que estoy aquí.

Obviamente en 12 semanas, apenas si me va a dar tiempo a mejorar lo que realmente quiero, sobre todo porque para que el conocimento traspase mi gruesa corteza cerebral necesitaría un milagro, pero en cualquier caso estoy muy contento de contar con una fuente de conversación tan importante como la que Fred me aporta.

Y no sabría que decir más.

Obviamente no se pueden resumir en un blog las largas conversaciones de fines de semana, pero solamente haré una última referencia para apoyar lo que vengo diciendo hoy sobre este hombre.

Cuando me atreví a preguntarle como había perdido a su mujer, si por accidente o por enfermedad, me comentó que habían vivido 31 años juntos, 29 de los cuales casados. Nunca tuvo una enfermedad grave. Ni siquiera los tipicos "achaques" de la edad.

Un día, se levantó del sofá para cerrar la ventana porque hacía viento y se desmayó.
Se golpeó la cabeza contra el suelo.

Fred llamó a una ambulancia que vino en 10 minutos y la trasladaron al hospital sin conocimiento.Allí le dijeron que lo que realmente había sufrido fué un desvanecimiento provocado por un infarto, bastante leve por cierto, del que sin lugar a dudas habría sobrevivido de no haberse golpeado tan fuerte con la cabeza en el suelo.
Dos días en coma y falleció.

Hablar inglés se más bien poco, pero las expresiones de la gente las capto fácilmente.
No obstante, estaba entendiendo lo que me contaba sin necesidad de esforzame demasiado en traducir mentalmente.

Me cuenta que él cree en el destino, y que te pongas como te pongas tu destino llega cuando y como quiere sin que puedas hacer nada.

En el mejor inglés que pude, le dije si eso le había provocado una especie de "resignación" en su forma de vivir, la cual había apreciado en las pocas semanas que llevaba aquí.

En otro perfectísimo inglés el cual entendí sin esforzarme demasiado, me dijo que, esos 31 años habían sido los más felices de su vida y que si el destino le había dado la oportunidad de disfrutarlos junto a esta persona, también el destino cerró esa etapa, tal vez de manera demasiado brusca y sin avisar, pero que no podía cambiarlo y que era consciente, que lo que le quedaba por delante no iba a ser ni de lejos, tan bueno como lo anterior.

Es de suponer que a la persona a la que más feliz le haría oir este comentario sería a su mujer.


Pues....Ole por Fred.
Supongo que acabaré haciéndome del Liverpool.



Besitos a ellas y abrazos a ellos.


Pink

sábado, 13 de octubre de 2007

VECINOS

Hello everybody !!!

Hoy tengo pocas ganas de escribir.
Ya iré informando en sucesivos post, de cosas que me están pasando aquí en Brighton (escuela, casa, compras....etc.).

Pero como digo, hoy me limitaré a presentaros a la nueva gente que estoy conociendo aquí....
Menuda diferencia con Vancouver !!!!!

Además de que todos hablan inglés perfectamente, cosa que no ocurría en Canadá, son gente super maja y estoy encantado.

En fín,, estos son:



Este es Fred, mi "house-Father".
Como dije en el post anterior, es super majete.

Me habla constantemente.
Tiene una colección de películas en la casa acojonante.
Casi todos los días nos vemos una (con subtitulos en inglés, porque a palo-seco no me entero de casi nada).
Le encanta el cine lo cual me viene de perlas.
Solemos hablar mucho sobre películas.





Estos son los vecinos de la casa de al lado.

También super majos. Tienen dos hijos.

No sé exactamente a qué se dedican, porque no me lo han dicho, pero deben tener bastante pasta porque se gastan unos coches de narices.

El creo que tiene una pastelería en Peacehaven, pero no estoy seguro.

Ella está siempre en casa, porque me fijo por las mañanas mucho cuando salgo a la academia temprano y cuando llego. Siempre la veo en la terraza limpiando y haciendo cosas en la casa.

Aunque deben tener pasta (que me imagino yo...)son bastante sencillos y se puede hablar con ellos de todo.

Tienen un perro que se llama Brad muy simpático y coincidimos a veces en el parque cuando le sacan a hacer pis.




Estos son los otros vecinos que viven justo en la casa contigua a la que yo vivo.

Son un pelín mas remilgados, sobre todo ella.
El se llama David, como yo.

Me dá la impresión que ella es un poco estirada porque debió trabajar de modelo...o algo así.
Con estos hablo un poco más que con los de antes.

Me enteré que ella se presentó a un casting del "operación triunfo" inglés y no llego a pasar las primeras pruebas....y estaba un poco cabreada. O eso me pareció a mí.

El es muy majete y hablo con él a veces de fútbol. Tiene una tele de plasma acojonante en su casa y el otro día nos vimos un partido de la Champions.

A veces le veo en su jardín cambiando la tierra a los geranios. También el gusta la jardinería como a mí y eso me ayuda a tener temas de conversación con él.

Aunque viste un poco raro (le gusta llevar collares un poco exagerados...) es muy sencillo y da gusto hablar con él.

Le tengo que preguntar donde trabaja exactamente, cuando vaya cogiendo más confianza.


En fin....ya seguiré contando más adelante curiosidades.
De momento, ya conocéis un poco más de la gente con la que me muevo ahora.


Por hoy nada más.


Besos a ellos, abrazos a ellas.

David.

viernes, 5 de octubre de 2007

LA FUGA (II)










Buenos días:


Lo primero comentar las dos fotos anteriores.

Aquí es donde vivo ahora. El pueblo se llama Peacehaven y está a 10 Kilometros de Brighton en la costa sur de Inglaterra.

Y ahora me meto en materia.
Con este post que publico ahora, doy por finalizados mis comentarios negativos sobre mi familia de Vancouver.

Pero creo necesario completarlo con los dos capítulos que comenté ayer.


CAPITULO II

EL “IDIOMA” EN LA FAMILIA.

Todavía no alcanzo a comprender, como una persona viviendo en un país durante quince años no sea capaz de aprender de manera más o menos digna el idioma del país que se acoge.

Pues esto me pasó con esta familia.

Obviamente entre ellos hablaban en Tagalo (así se llama la lengua que hablan en Filipinas) constantemente, en Tagalo continuaban hablando en sus respectivos trabajos y en Tagalo hablaban con sus amigos, vecinos y familiares.

De esta manera no mejoraban nada ni su pronunciación ni su gramática ni nada parecido.

En mi caso, la madre, hablaba bastante mejor que el Padre (el de las albóndigas manuales), pero le pegaba patadas al diccionario casi tanto como yo, que se supone iba a aprender.

Lo del padre hablándome en infinitivos me dejaba descolocado porque si me preguntaba si me apetecía comer, con un simple “EAT?”, pues no sabía si extenderme en la respuesta o contestar con un simple, SI o NO. Nada de florituras.
Joder!!! Conjuga cabrito….!!!! Conjuga!!!!....que hablas peor que los indios en las películas de John Wayne….

Al final me pasaba eso. Que acababa hablando casi tan poco como él.

Si me preguntaba por la escuela cuando me veía, se limitaba a decir “ESCUL?” a lo que yo respondía “GOOD”, y el se daba por satisfecho.

El dialogo solía acabar aquí, salvo que yo cerrara tan extensa conversación con un “BYE”, por respeto, porque este tipejo, lo de hello y goodbye no entraba en su vocabulario.

En mi caso, la verdad es que tenía al menos al hijo pequeño que nació en Vancouver y hablaba perfectamente. Otra cosa es que él quisiese hablar conmigo, porque las escasas veces que lograba despegarlo del ordenador, me lo llevaba al parque y me hablaba más bien poco.

Lamentablemente por los alrededores no estaban poblados por fauna distinta a la que yo tenía en la casa, por lo que desde el principio, traté de pasar el mayor tiempo posible en la escuela.


CAPITULO III (y último)
EL RUIDO.


La casa digamos que no se caracterizaba por la isonorización.
Creo recordar que en pasados post hice referencia a este aspecto de la casa.

Era algo increíble. Se oía todo. No solamente lo de mi casa sino lo de la casa de Arriba.

Digamos que la vivienda estaba dividida en dos plantas, donde habitaban dos familias distintas.
Yo vivía en la casa situada en la planta baja, es decir, el sótano.

Para empezar, toda la familia, se tratase de un Lunes, Jueves, fin de semana, festivo o no, se levantaban en pleno a las 6 o 6.30 de la mañana.

Digo, se levantaban, no que se despertasen, porque en muchas ocasiones me encontraba tanto al padre como a la madre durmiendo tirados en el sofá, cosa que no me resultaba agradable. Se trataba simplemente de un cambio de lugar.

No entendía esa manía por trasladarse de sitio, cuando estaban durmiendo en su cama tan a gusto, digo yo.

Pero refiriéndome al ruido que es de lo que se trata, comentaré que en esa casa existía la norma de golpear, dejar caer, empujar o lanzar cualquier objeto o cosa susceptible de hacer ruido.

Por ejemplo las puertas.
Las puertas eran muy ligeras y tenían las cerraduras no en muy buen estado que digamos.
En condiciones normales, la persona que cierra una puerta en su casa, debe acompañarla hasta que se cierre y con un sencillo movimiento del pomo o en su caso manivela, hacer que ésta se acople con suavidad al cerco de la misma.

Bueno….pues en mi familia va a ser que no. Lo mejor era lanzarla con la mayor fuerza posible para cerrarla. Esto lo hacían todos en la puerta de entrada, del baño, de las habitaciones…..
Juro que habré oído miles de portazos de todas las puertas de la casa.

Si estaba en la cama, podía identificar el camino que alguien recorría por los diferentes sonidos de los portazos.

BLAM!!!!...mira, el chaval se acaba de levantar……..BOOOM!!!!!.......ahora entra en el baño a hacer el pis mañanero…….BOOOM!!!!!.....ya ha terminao el angelito……….PLAFFF!!!!!......ahora sale a la calle a no se que cojones tan temprano……PLAFFF!!!!....again…ahora la cierra…..BOOOOM!!!!.....mira….antes pis….ahora caca….

En fin…..horrible….

Añado a este comentario, que en esa casa, la norma era no solo lanzar las puertas, sino que se hacía extensivo a todo tipo de objetos.

Me detendré en dos aspectos que me llamaban la atención. El primero eran los platos y los vasos. Nadie en la casa, salvo el que subscribe, dejaba los vasos o los platos en el fregadero, con suavidad, sino que eran lanzados desde una distancia absolutamente calculada, que rozaba el límite por el cual el objeto se rompe.

Acojonante. Ese vaso a las 6 de la mañana tirado desde cierta distancia y golpeando en el fregadero de acero inoxidable, no tiene nombre.

El segundo aspecto sobre el que quiero detenerme es sobre el cuarto de baño, más concretamente en el inodoro y la tapa que lo cubre.

No sé si yo soy un tiquismiquis, es la edad, o es que realmente le doy importancia a lo que no la tiene, pero me parecía terrible, tener que despertarme de un sobresalto por el ruido de una tapa del water cayendo sobre el inodoro a no se que velocidad, pero en cualquier caso desproporcionada e ilógica.

Juro que hablo de un golpazo capaz de despertar a una persona, y era el que me resultaba más desagradable.

Mas incluso que el gargajo mañanero mientras se duchaba el Padre (que conste que avisé a los pulcros de lo que iba el post…..aún estáis a tiempo de dejar de leer…)

Digamos que todo lo que uno puede hacer en un baño, lo podía oir con total claridad. No sé si detenerme demasiado en este aspecto por no herir la sensibilidad de nadie, así que lo resumiré diciendo que me conozco como se tiran pedos todos los miembros de la familia incluído el vecino que bajaba de vez en cuando a tomar una cervecita.

Otro aspecto del ruido, menos asqueroso pero igual de desagradable a mis oídos era el volumen de la televisión y del ordenador.

No sé si todos los miembros de la familia tenían principio de sordera, pero si se ponía la televisión, a partir de ese momento, era totalmente imposible mantener una conversación. No es que hablásemos mucho como he comentado anteriormente, pero si la televisión estaba puesta, ya no se podía ni intentarlo.


Luego estaba el niño. El jodío le daba por entrar en YouTube a repasar todas las canciones de High School Musical, y cantarlas a voz en grito.
Además desafinaba el jodío que parecía un gato maullando……que cabrón, que poco oído tenía. Y me da la impresión que se imaginaba que lo hacía bien.

Desde luego, se presenta al casting de operación triunfo y acaba saliendo en los resumenes Friáis.

Sé que muchos estaréis pensando que exagero, pero palabra de honor que si yo pongo la televisión en mi casa a la mitad del volumen que se ponía en ésta, acabamos todos en el manicomio.

En fin….creo que no me extenderé más y como dije al principio, doy por finalizado cualquier comentario negativo sobre mi etapa Canadiense.

Sobre todo porque ahora no solamente he mejorado sino que esta casa lejos de ser aceptablemente cómoda, es una verdadera pasada en cuanto a comodidades.

En sucesivos blogs comentaré como es mi vida aquí, pero solamente haré referencia ahora a una serie de aspectos que la diferencian de la de Vancouver.

1- La tapa del Water se baja sola lentamente mediante un sistema hidráulico extraordinariamente silencioso que me ha dejado flipado. Juro que esto es verdad. Yo desde luego no lo conocía, pero me parece perfecto y útil.
2- Fred (que así se llama el dueño) no solamente habla un perfecto inglés (ya que es nativo) sino que se preocupa de darme conversación constantemente.
3- Cuando pone la televisión, si yo me voy a la cama, la quita aunque yo le insista en que no lo haga y se baja a la planta baja a verla. El único ruido que oigo por las mañanas al levantarme es el de las gaviotas revoloteando por encima de las casas.
4- Fred cocina todos los días, todo tipo de platos a cual mejor. Siempre preocupado de los dos estudiantes que aquí estamos. No es espectacular, pero más que digna y variada. (arroz todavía no nos ha puesto, lo cual agradezco)

Que mas puedo decir?

Pues que estoy encantado de haberme cambiado y que espero aprender en estos dos meses algo de inglés que me sirva no solo para defenderme en el Mc Donalds de Oxford Street.

Comentaré varios detalles de la casa y de mi estancia aquí, la semana que viene.


Buen finde a todos / as.

Besos a ellas y abrazos a ellos.

PINK

jueves, 4 de octubre de 2007

LA FUGA

Buenos días:

La verdad es que esto de tener abandonado el blog durante tanto tiempo, hace que tenga tantas cosas que contar, que no se ni por donde empezar.

Como me he propuesto actualizarlo con mas frecuencia (al menos esa es mi intención), creo que hoy, le dedicaré el 100% del espacio a contar parte de la realidad que me ha impulsado a cambiar de aires.

Si resultase demasiado largo, como desconozco las limitaciones del blog para escribir textos demasiado extensos, lo separaré en capítulos.

Obviamente mientras estuve en Vancouver, no podía contarlo todo, por el riesgo que suponía que mis comentarios llegasen a mi familia de acogida y que ello provocase que lo que me quedaba de estancia fuese aún peor de lo que ya era hasta ese momento.

Hay gente que lee este blog que ya conoce parte de la historia, pero creo que al menos el resto debería saber la realidad de lo acontecido.

Antes que nada, quiero decir que si hay algún menor de edad, se abstenga de continuar leyendo y abandone inmediatamente esta web. Así mismo si alguien es demasiado escrupuloso para leer ciertas asquerosidades, también le recomiendo que no continúe. Avisados están ambos.


Hago extensiva esta advertencia al post de mañana que será continuación de este y en el que diré, caca pis culo y pedo......y como no encuentro un simbolo de dos rombos que quede bien, debo advertirlo de palabra.

También hago mención expresa al colectivo de Filipinos que pueda vivir en España para que no se lo tomen a mal, puesto que lo que me ha ocurrido en dicha familia no quiere decir que todos los que han nacido allí, tengan que ser necesariamente como una de las personas que describiré a continuación.

De igual manera pido disculpas a Isabel Preysler si en algún momento me paso describiendo a algunos de sus compatriotas.



Lo mismo me encuentro a cuatro mafiosos Filipinos en Brighton y me tiran al mar con los pies atados a una piedra.....en fin......creo que me arriesgaré.

Dicho esto me meto en materia para no aburrir demasiado a la concurrencia.


Para empezar diré que mi marcha de Vancouver no se puede relacionar directamente con la búsqueda de más proximidad a mi país (Familia, amigos, casa…..etc.) creo que hay que definirlo más como una fuga en toda regla, de ahí el título del post.

Porque esa es la verdad, he tenido que fugarme como cualquier preso político Cubano en cayuco que trata de alcanzar las costas de Estados Unidos.


Lo de mi familia de acogida en Vancouver, no tiene nombre.
Bueno si lo tiene, pero confío en que al finalizar este blog, los que no se hayan dormido leyendo sean capaces de darle uno.

Sin valorar en absoluto el poder adquisitivo que cada uno tiene, si que creo que hay aspectos mínimos que una familia que acoge estudiantes (de la edad que sea) debe cumplir.

Y no me refiero a aspectos meramente higiénicos, que también, sino a que de algún modo, el estudiante debe adaptarse a ciertas costumbres y reglas que le son poco habituales, de la misma manera que la familia debería tratar de adaptarse un poco a la presencia de una persona extraña en la casa.

Esto último es lo que realmente me extrañó de la familia donde me alojé.

Lejos de adaptarse, me daba la impresión que exageraban sus defectos. Y me refiero sobre todo al Padre, que es sobre el que centraré casi todas mis posteriores críticas.

Por ser claro, una cosa es que se te escape un pedo y otra que hagas fuerza para tirártelo delante de tu invitado (que en definitiva, estudiante o no, eso es lo que eres, un invitado). No se si me explico con claridad.

Yo no entiendo mucho de aerofagia, pero no se me ocurre otro ejemplo más claro para expresarme.

Como he dicho al principio del post, voy a separar en tres capítulos el resumen de mi estancia en tierras Canadienses, comenzando por lo gastronómico.

CAPITULO I
LA COMIDA

Yo no sabía que en Filipinas, y en otras países Asiáticos, es bastante normal comer con las manos. Desconocía esta costumbre. El caso es que supongo que eso viene heredado de la gente que no dispone de cubiertos, pero si los tienes, úsalos joder!!

Este hombre (me refiero al Padre de familia), no solo comía con las manos, sino que estaba empeñado en matarme de un perdigonazo de arroz, judía, pollo, cerdo o de cualquier otro alimento que estuviese comiendo en ese momento.

El primer día que cenó en la mesa conmigo, no daba crédito a lo que veía.
Esa manera de engullir TODO con las manos, se me asemejaba a un cerdo en la porqueriza rebuscando entre el barro algo que llevarse a la boca.

Lo único que agradecía de ese espectáculo lamentable, era la brevedad. Porque era tal la velocidad que el pollo se daba en tragarse lo que había en la mesa, que apenas me daba tiempo a mí a empezar el primer plato, cuando él ya había terminado.

Y eso que yo como bastante rápido. Pues este hombre me ganaba por goleada.

Si comer con las manos, ya resulta un espectáculo, lo de los ruidos, y pseudo-conversaciones mientras comía era para filmarlo. No solo hablaba con la boca llena, pero la misma habilidad que tenía para manejar las manos haciendo unas enormes albóndigas con lo que tuviese en el plato, no la tenía para mantenerlo dentro de la boca hasta que se lo tragase.

Se empeñaba en enseñarlo a la concurrencia , entre la que yo por desgracia me encontraba, añadiendo perdigonadas a diestro y siniestro que me obligaban a poner discretamente las manos sobre mi plato protegiendo mi comida de los proyectiles que nos lanzaba.

Llegó un momento que me preocupaba más que no me cayesen sus restos en mi plato a que me diesen en la cara, porque prefería darme una ducha después de comer antes que tener que apartar lo que me lanzaba para no tener que pasar por la desagradable tarea de comérmelo.

Os juro que no he visto espectáculo gastronómico más desagradable que éste.

Además se fué superando según pasaba el tiempo.

Al principio recuerdo que, aún comiendo todo con las manos, había ciertas cosas que ingería acompañándose ligeramente de una cuchara o un tenedor, pero al final, era todo tipo de alimentos.

Excepcionalmente y por razones obvias, la sopa la tomaba sorbiendo directamente del plato, lo que lo provocaba un ruido más desagradable si cabe que los que hacía cuando ingería sólidos.

Esa manera de sorber no la había visto en ningún sitio. Al menos mientras eso ocurría, únicamente me producía asco, pero no tenía riesgo de escupitajo de fideo porque normalmente no hablaba mientras sorbía.

Además no se trataba de sorbos de corta duración y rápidos. Digamos que se preparaba, tomaba aire y ponía en marcha la bomba de achicar sopa que tenía por boca y en dos tacadas se ventilaba un plato el doble de cargado que el que podía tener yo.
El espectáculo sonoro era por lo tanto intenso pero de corta duración.

Los primeros días me extrañaba que se lavase las manos y con ellas totalmente empapadas se sentase a la mesa, pero rápidamente me percaté que era porque de esa manera la comida (cargada de grasas la mayoría de las veces) no se le pegaba a las manos y podía limpiárselas con más facilidad que si estaban secas, lo cual demostraba que el tío era guarro pero inteligente, mira por donde.

Un día en el que la señora nos había preparado arroz a la cubana, con su tomate, sus huevos fritos, su plátano frito….etc…. Me dio por pensar , si sería capaz de amasarlo con las manos y comérselo.

Efectivamente no solo fue capaz, sino que demostró una habilidad extraordinaria para mezclarlo todo y hacer sus famosas bolas a modo de filete ruso gigante para pasar a ingerirlo abriendo la boca como un hipopótamo bostezando y tragarla prácticamente sin masticar.

Otro detalle que tenía este sujeto era que no bebía durante la comida. Todo iba para adentro sin ayuda de liquido alguno. Al final de comer se levantaba, llenaba un enorme vaso que tenía en la encimera de la cocina (de casi un litro calculo yo) y se lo bebía de una tacada.

El espectáculo finalizaba con un sonoro eructo (el cual no me sorprendía después de lo visto anteriormente). Eso sí, ni “excuse me” ni leches. Eructo al canto y algo parecido a un “buff” al final, a modo de “madre mía que a gusto me he quedao”.

Como ya he dicho anteriormente, lo único positivo de espectáculo tan lamentable, era la brevedad. Inmediatamente se levantaba de la mesa aunque nadie más hubiese acabado y en cuestión de minutos ya estaba roncando en el sofá, el cual estaba a escasos centímetros de mi cabeza, lo cual no es que me gustase, pero prefería continuar comiendo oyéndole roncar que tratando de esquivar los restos de comida que lanzaba.

Otro aspecto positivo, si es que tenía alguno, es que por motivos de su trabajo y de mi horario, esto solamente se producía dos o tres veces a lo sumo, en la semana.
Y al final, nunca, porque ya me ocupaba yo de excusarme para cenar fuera cada vez que al orangután le tocaba cenar en la casa.

Respecto a la variedad en la alimentación, no puedo extenderme porque se basaba en arroz, arroz y los fines de semana arroz.

El arroz que cocinaban era tan pastoso que si metías una cuchara en el cazo te lo llevabas entero.

Con una mano pues, era imposible servirme. Debía ayudarme de las dos de manera que sujetaba fuertemente el recipiente y con la otra metía mano a aquel engrudo para servirme un poco en el plato.

Luego venía la tarea de desmenuzarlo a base de golpes.

Yo, en ocasiones , lo hacía con el cuchillo, como quien corta un pudding.

Obviamente el padre, como se hacía sus albóndigas con la mano, no necesitaba que el arroz estuviese suelto, muy al contrario, creo que lo hacían adrede así de asqueroso para facilitarle el trabajo al “señor de los albondiguillos” como le llamaba yo delante de mis compañeros de escuela.

El arroz pues era la base de la alimentación, acompañado de verduras, en ocasiones pollo, carne (siempre de cerdo) y otras variedades gastronómicas de aspecto y sabor bastante deficientes.

Antes de cerrar este capítulo haré una especial mención nuevamente a mis ex – compañeras de viajar y comentaré algo que probablemente solo ellas entenderán.

Queridas mías, lo de “ el camión de la basura” de M.A. y N.L.O. en Antalia (Seguro que ellas saben a quien me refiero), es un juego de niños comparado con lo que yo he visto hacer a ese cerdo. Y os aviso que estoy totalmente curado ante cualquier asquerosidad gastronómica que se me ponga por delante.
Si me tenemos la oportunidad de comer en otra ocasión (espero que así sea), podéis hacerme el camión de la basura, y el accidente con muertos, que me quedaré como si nada, lo prometo.

Y dicho esto, creo que dejaré para mañana los dos capítulos que me quedan.
A saber:

CAPITULO II. EL IDIOMA EN LA FAMILIA.
Aquí haré un breve repaso de los problemas idiomáticos en mi familia de acogida.

CAPITULO III. EL RUIDO.
Aquí me extenderé un poco en la gran variedad de sonidos que se podían escuchar en la casa, ya fuesen provocados o fortuitos.

Pues esto es todo por hoy.

Antes de despedirme, anticipo al personal que todo ha cambiado por completo y que me encuentro en el un verdadero paraíso comparado con lo que me encontré en tierras canadienses.

Estoy encantado con mi nueva casa en Brighton, de la que ya publicaré fotografías (he perdido mi adaptador para pasarlas al portátil, para mantenerme fiel a mi personalidad) y explicaré donde vivo.

Lo de la casita al borde de un acantilado y el hombre que vive solo (viudo) al que le apasiona el fútbol, me ha pillado de sorpresa….
Esto de poder ver la Champions League sin que traten de quitarte el mando es acojonante.
Además el pueblito se llama Peacehaven....que bonito...no ?
Mejor que vivir en Guarromán o en Rodrigatos de la Obispalía....vamos digo yo.

Nada más de momento.

Besos para ellas y abrazos para ellos.

Pink